El Rey dio su último recital, tal día como hoy, en el Marquet Square Arena de Indianápolis (EE.UU.). La canción que cerró ese concierto fue Can’t help falling in love, uno de sus clásicos más populares y más recordados.
Pocos días después, el 16 de agosto de ese mismo año, falleció en su mansión de Graceland, dejando tras de sí uno de los legados más importantes dentro de la historia de la música, no en vano él fue uno de los pioneros del rock and roll. Tras su muerte, sus canciones siguieron sonando en las voces de varios cantantes, y por eso, al día de hoy, el mito continúa vivo.
Fuente - Texto tomado de m80radio.com:
http://www.m80radio.com/efemerides/
Video tomado de YOUTUBE:
https://www.youtube.com/watch?v=pCuh7XpYSnE
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